lunes, 21 de febrero de 2011

LEY ANTITABACO

El fumar se va a acabar


Desde el 2 de enero de 2011, entraba en vigor la nueva ley antitabaco en donde quedaba firmado que no se

podía fumar en lugares públicos.
Este símbolo ya se ha colgado en muchos bares y establecimientos en donde hasta ese día se podía fumar  a placer de cada persona. Esta nueva ley antitabaco ha afectado a muchos locales, principalmente bares, en donde, según afirma el personal de estos establecimientos, han perdido clientela.
La nueva ley prohíbe fumar en espacios cerrados, así como parques, colegios, hospitales, etc.

Personalmente esta prohibición de fumar a mi me ha resultado de los más acertada posible. También he tenido la oportunidad de oír, dentro de mi entorno social, a personas que se quejaban de esto: “Ya no vamos a poder ni fumar en la calle”, “¡Hasta donde hemos llegado!”, entre otras frases. Yo no soy fumadora, tampoco puedo decir que no lo vaya a ser, porque no lo sabes, y sé que esta ley ha afectado a muchas personas.
Cuando se saca este tema, tanto con amigos, como en alguna reunión familiar…, cada uno da su opinión, y yo personalmente soy de las que dicen que la nueva ley antitabaco ha sido muy acertada. Yo no tengo por qué inhalar el humo del cigarrillo de una persona, tanto si es como no, ajena a mi vida. Y muchas personas seguro que también corroboran mi opinión. Hay muchos fumadores que ante esta contestación su respuesta es “Pues vete a otro sitio donde no te moleste el humo”. ¿Tenemos que hacer eso los que no fumamos?, no lo creo. Estamos en todo nuestro derecho de quejarnos por todas estas cosas al igual que los fumadores, y ahora que esta ley se ha empezado a utilizar, podemos decir “Gracias”.

Pero, ¿Respeta todo el mundo esta ley?
Hay personas que no respetan la ley, y siguen fumando en lugares en los que está prohibido. La culpa de esto la tienen también los establecimientos que han permitido el que siguieran fumando. Muchos bares se han visto acorralados ante esta prohibición, y con temor a que su clientela baje, han hecho caso omiso y han afirmado que no van a prohibir fumar en su local, es suyo, y no tienen porque prohibir una cosa que ayuda a la recaudación de todos los días. Si es verdad que el tabaco es la causa por la que muchas personas entran a los bares, y lo acompañan con un café o un aperitivo, y ahora que se ha firmado esta ley, muchos bares perderán clientes fumadores, pero no reconocen que también ganaran clientes que antes ni se acercaban a su establecimiento por el aire contaminado que se respiraba en sus locales, pero es una ley, la tenemos que respetar, y no nos la podemos tomar a la ligera.
En algunos casos parece que a los fumadores no les importa saber los efectos que el tabaco produce en su organismo al cabo de un tiempo, porque si no, se concienciarían del gran riesgo que corren a no llegar muchos a la vejez.
Entre muchos de los riesgos que el tabaco produce se encuentran, el cáncer de pulmón, es el más frecuente a nivel mundial y está presente en las vidas de más del 95% de los fumadores y de los ex fumadores; la bronquitis, en donde los bronquios se inflaman y dificultan la entrada de aire al organismo, son más del 80% de las personas que sufren esta enfermedad; el enfisema pulmonar, en donde se retiene el aire en los pulmones y se produce la destrucción de las paredes de los alveolos, el enfisema, al igual que el cáncer de pulmón, constituye el 95% de las personas, y va asociado normalmente  junto a la bronquitis crónica.

Estas enfermedades, parecen no ser un gran motivo para que la mayor parte de los fumadores dejen ese hábito de fumar, que tarde o temprano les provocará, en el más trágico de los casos, la muerte. Actualmente en España, el porcentaje de fumadores alcanza casi el 35%. Esto es más grave en los jóvenes, que empiezan con el hábito de fumar a una edad muy temprana, y en la mayoría de los casos es a causa de las amistades que incitan a iniciarse en el hábito como ellos. Se habla de que entre 80.000 y 100.000 jóvenes de todo el mundo se convierten en fumadores adictos cada día, una cifra alarmante para la sociedad en la que vivimos hoy en día.
Muchas de las muertes que se producen en España y en el mundo son a causa del tabaco y las enfermedades que éste produce, pero las personas fumadoras parecen mostrase alejadas de la conciencia de estas cifras.
Cada uno es libre de hacer lo que quiera con su vida, pero yo creo que la vida que tenemos no es algo para desperdiciarlo con una costumbre que acaba poco a poco apagándola.

sábado, 19 de febrero de 2011

¿Cómo debe dar clase un profesor?

A la hora de enseñar...

Se nos ha propuesto un trabajo para decidir cómo debería dar clase un profesor, en relación a lo que hemos estudiado.

Primero hay que motivar al alumno para que de él también se vea el progreso.
Cada persona, cada alumno, tiene distintas motivaciones, distintos intereses en los que basarse, por lo que siempre va a ser y ha sido difícil el enseñar.
Un buen profesor tiene que tener la capacidad suficiente como para resolver problemas relacionados con sus asignaturas, lo que se llama inteligencia.
Un buen profesor debe preocuparse de que todos sus alumnos se enteran del temario que se está dando, así, si alguno de esos alumnos tiene algún problema para seguir sus clases, el profesor debe centrarse más en él, pero  sin dejar de lado a los demás.
Un buen profesor debe saber respetarse por todos sus alumnos y hacerles saber que es él el que marca la pauta de cómo debe comportase el alumnado durante el tiempo que se desarrollan sus clases. El respeto  mostrado debe ser mutuo, tanto por parte del profesor al alumno como del alumno al profesor. Siempre y cuando un alumno demuestre toda su intención en aprender, ya sea con el trabajo en clase, con una buena actitud, con respuestas bien contestadas a las preguntas hechas por el profesor…, éste debe premiar ese comportamiento y adoptar un aprendizaje conductista, del mismo modo que si es al contrario, si no demuestra su progreso, no presta atención, no tiene una buena actitud, hay que castigarlo.
En las clases se debe llevar un orden, que debe de ser respetado a la hora, sobre todo, de resolver preguntas de los alumnos. El temario dado en las clases debe de ser entendido y comprendido.

En conclusión y para dar por finalizado el tema, el ambiente de la clase debe de ser agradable y ameno, que todos los alumnos muestren su interés por la asignatura y que las clases sean productivas a la vez que participativas, en donde todos los alumnos expongan sus ideas y sus opiniones.